En Malanquilla se han denominado caballerías a las mulas, machos, burros o bestias que se utilizaban para las labores del campo. Fueron imprescindibles para el trasiego diario de los agricultores. Eran animales domésticos que solían vivir en las cuadras de las casas, junto al resto de dependencias de la vivienda.
Con la aparición de la maquinaria, las caballerías fueron quedando en segundo plano hasta desaparecer.
Actualmente hoy se recuerdan gracias a los utensilios y aparejos que aún se conservan en cocheras y almacenes, o las antiguas cuadras de las casas que actualmente están destinadas a otros usos.
Voces de mando para las caballerías:
Huesque: Izquierda
Pasalla: Derecha
Sooo: Detener
Arre: Avanzar